Ayer día 25 de abril la Cruz de los jóvenes recorrió comarcas y pueblos de nuestra diócesis.
Morella, por la mañana, con una eucaristía, dio gracias a Dios por la juventud a la vez que pedía por ella. Por la tarde en el pueblo de San Mateo, en el convento de las Madres Agustinas,
nuestro obispo acompañó la Cruz con una celebración de la eucaristía, en la que el pueblo se volcó. Ya en la noche, una vigilia presidida por mosen Ángel Pitarch reunió a jóvenes, mayores y niños entorno a la Cruz y pidió por los más necesitados. Nos recordó que para poder llevar las cruces de la vida debemos estar muy unidos a Cristo. San Mateo acompañó la Cruz y el icono de la virgen por las calles, orgullosos de que hubiese estado en su ciudad en un día tan señalado.La organización la recogió a las afueras y la llevó a Vinaròs.En la residencia de las Hermanitas de los Desamparados cerca de las doce de la noche , algunos de sus mayores y sus monjitas la recibieron con alegría y ayudaron a instalarla en su capilla.
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